Bogotá, Colombia – A Nuevo informe de Amazon Underworld y Amazon Watch Revela los mecanismos de control de las redes criminales, la captura de territorios y la ausencia estructural de una gobernanza estatal efectiva en la triple frontera entre Colombia, Ecuador y Perú. Ofrece un relato detallado del control ejercido sobre la vida cotidiana, el comercio y las actividades cotidianas de las comunidades locales, así como el reclutamiento forzado de menores, convirtiendo la triple frontera en una de las regiones más violentas de Latinoamérica. En los últimos años, la triple frontera ha sido escenario de asesinatos de líderes sociales, múltiples masacres en comunidades, desplazamientos forzados e incluso ataques a las fuerzas armadas.
La investigación, resultado de ocho visitas de campo realizadas entre noviembre de 2024 y julio de 2025, se basa en más de 70 entrevistas confidenciales con actores clave, entre ellos líderes indígenas, representantes de organizaciones sociales, excombatientes, miembros de grupos armados, funcionarios públicos, periodistas, fiscales, defensores del medio ambiente y funcionarios internacionales. Los hallazgos confirman lo que muchas comunidades ya sabían: los grupos armados no solo compiten por rutas, sino que también controlan territorios, lo que provoca una destrucción ambiental masiva en el corazón de la Amazonía.
bram ebus, fundador de Amazon Underworld:
La triple frontera se ha convertido en un centro para el crimen organizado y el narcotráfico, pero precisamente por eso, también podría convertirse en un laboratorio para la consolidación de la paz y la política antidrogas. Solo si los gobiernos de Colombia, Ecuador y Perú replican lo que el crimen organizado ha dominado desde hace mucho tiempo —la cooperación transfronteriza— será posible revertir la dinámica de la violencia y la destrucción ambiental.
Rafael Hoetmer, Director del Programa de la Amazonía Occidental en Amazon Watch:
Nos encontramos en un punto de inflexión. Sin un cambio decisivo hacia una estrategia de seguridad basada en la cooperación transfronteriza, el liderazgo comunitario y la lucha contra las causas estructurales de la violencia, la gobernanza criminal en la triple frontera se profundizará y se extenderá a Ecuador y Perú. La paz y la seguridad en la Amazonía son imposibles sin que los pueblos indígenas sean el núcleo de la solución. Esta semana en Bogotá, las naciones amazónicas tienen una oportunidad histórica de cambiar de rumbo, y puede que no se repita.
Principales hallazgos del informe
Una presencia armada sin precedentes en la cuenca amazónica
Grupos como los Comandos de la Frontera (CDF), las disidencias de las FARC, Los Choneros y Los Lobos ejercen un control efectivo sobre zonas rurales enteras, superando a las fuerzas estatales en influencia y presencia. En regiones como Putumayo, Napo, Sucumbíos y Loreto, estas estructuras operan con impunidad, recaudan impuestos, vigilan el movimiento y regulan las actividades cotidianas.
De la criminalidad a la gobernanza paralela
Más allá de la violencia esporádica, los actores armados han consolidado sistemas de control social y político: imponen toques de queda, se infiltran en las estructuras comunitarias, obligan a asistir a reuniones semanales y reemplazan a las autoridades tradicionales. En muchos casos, el gobierno criminal es el único orden disponible para las comunidades abandonadas.

Colapso ambiental en áreas críticas para la estabilidad climática global
La minería ilegal ha devastado reservas naturales protegidas, con altos niveles de contaminación por mercurio documentados en el agua, los peces y las poblaciones humanas. Las fronteras fluviales ya no representan límites estatales, sino que se han convertido en corredores logísticos para el suministro de productos químicos, el narcotráfico, el contrabando de oro, armas y combustible.
El fracaso de la militarización y el colapso institucional
Las respuestas estatales han oscilado entre la negligencia y la militarización. En lugar de reducir la violencia, las operaciones armadas han provocado nuevas masacres, desplazamientos y violaciones de derechos humanos, mientras que la corrupción socava cualquier posibilidad de recuperación territorial sostenible. En Ecuador, Colombia y Perú, se han documentado casos de colusión entre las fuerzas del orden y estructuras criminales.
La amenaza de escalada y la oportunidad para la paz y la cooperación estructural
A pesar de la complejidad de la situación, el informe identifica oportunidades concretas: las conversaciones de paz con las FDC en Colombia, las plataformas multilaterales existentes como ATCO y la Comunidad Andina, y las demandas de la comunidad de alternativas económicas viables ofrecen una base para una respuesta regional coordinada.
Recomendaciones básicas
- Lanzar una estrategia regional de seguridad con enfoque territorial y ambiental, liderada por ATCO, con participación directa de comunidades amazónicas, líderes indígenas y organizaciones de base.
- Fortalecer los mecanismos de protección a los defensores ambientales, promoviendo los sistemas de justicia indígena y el reconocimiento de las guardias territoriales.
- Impulsar la sustitución gradual de cultivos ilícitos, con inversión pública real, titulación de tierras y acceso a mercados alternativos.
- Incorporar acciones urgentes de restauración ecológica y limpieza de ríos contaminados, en coordinación con las fiscalías ambientales y organismos multilaterales.
- Fortalecer las negociaciones de paz con garantías de derechos humanos y verificación internacional, involucrando a Ecuador y Perú.
Un llamado a la acción antes de la cumbre presidencial
El informe se presentará oficialmente en el marco de los preparativos de la Quinta Cumbre Presidencial de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica. El evento contará con la presencia de representantes diplomáticos, organizaciones internacionales, sociedad civil, investigadores y defensores del territorio.
La Amazonía no puede seguir gobernada por redes armadas mientras los Estados se repliegan. La respuesta debe ser tan transnacional como el problema. Se necesita una verdadera cooperación regional, centrada en el respeto a los derechos humanos, la sostenibilidad ambiental y la autodeterminación de los pueblos que habitan la selva.
Fondo
Inframundo Amazónico Es un proyecto de periodismo de investigación centrado en el crimen organizado, las economías ilegales y los conflictos armados en la cuenca amazónica. Realiza investigaciones de campo exhaustivas, a menudo en zonas remotas y de alto riesgo, para exponer las redes y dinámicas que impulsan la violencia, la destrucción ambiental y el daño social. Al documentar estas realidades, Amazon Underworld busca informar el debate público, influir en las políticas y amplificar las voces de las comunidades afectadas.
Amazon Watch es una organización sin fines de lucro que trabaja para proteger la selva tropical y promover los derechos de los pueblos indígenas en la cuenca amazónica. Fundada en 1996, colabora directamente con organizaciones indígenas y ambientales para combatir la deforestación, el cambio climático y las violaciones de derechos humanos. Mediante la promoción, las campañas y la presión internacional, Amazon Watch Tiene como objetivo responsabilizar a los gobiernos y las corporaciones y, al mismo tiempo, apoyar soluciones locales.




