Los Angeles, CA – Se le aviso a la Junta Directiva de Chevron que se requiere que la compañía notifique legalmente a la Comisión de Seguridades e Intercambio (SEC) – una agencia del gobierno de los Estados Unidos – y a accionistas de Chevron sobre el juicio y las responsabilidades ecológicas que heredarían al fusionar con Texaco en respecto a los cientos de lugares contaminados por Texaco en la Amazonía Ecuatoriana.
Atossa Soltani, la Directora Ejecutiva de Amazon Watch, pidió en la Asamblea Anual que la gerencia de Chevron revelara las responsabilidades serias en la Amazonía Ecuatoriana e insistió que la compañía mandara una delegación para investigar la contaminación extensa causada por Texaco durante sus operaciones de 1972 al 1992. Ella presentó, así mismo, un libro de 800 páginas a la Junta Directiva, creado por los demandantes titulado Después del Dorado, el cuál documenta en detalle cada uno de los lugares contaminados y donde se localizan.
David J. O’Reilly, Jefe Ejecutivo de Chevron, agradeció a la Directora Soltani por haber presentado la información y añadió que la compañía “reconocía el caso y revisaría los documentos.”
En febrero, Cristóbal Bonifaz, el codefensor de los demandantes en el juicio pendiente presentado a nombre de los pueblos indígenas y habitantes locales de la selva Amazónica en Ecuador – Aguinda et al. v. Texaco Inc., y Jota et al. v. Texaco, Inc. – envió una carta a la Comisión de Seguridades e Intercambio con respecto al incumplimiento de Chevron de revelar las responsabilidades las cuales tienen la potencialidad de “representar un valor de más de veinte por ciento de los bienes de Texaco, Inc.” La carta declara que “Texaco dejó más de trescientos cincuenta sitios contaminadas en lugares selváticos, los cuales continúan contaminando el agua potable en la región hasta hoy en día. Actualmente, miles de habitantes selváticos están sufriendo un número de enfermedades, incluyendo cáncer y problemas dermatológicos, a causa de las acciones de Texaco.”
La carta añade el argumento de Exxon Valdez, el cual él dice que “se desvanece en comparación con éste desastre.” En el caso de Exxon Valdez, un jurado concedió más de ciento ochenta millones de dólares en daños compensatorios a los demandantes y asignó una suma adicional de cinco mil millones de dólares por las acciones desastrosas de la compañía Exxon.
Texaco extrajo más de 1.5 mil millones de barriles de petróleo de la selva virgen Amazónica del Noroeste Ecuatoriano. A fines de ahorrar millones de dólares en costos de extracción, Texaco simplemente botó los deshechos tóxicos de sus operaciones diariamente en el medio ambiente durante veinte años.
El mes pasado, una delegación de Amazon Watch visitó los lugares contaminados y regresó con evidencias visuales del legado tóxico de Texaco.
Información a fondo puede ser encontrada en www.texacorainforest.org . O para fotos, videos, o el libro Después del Dorado (en CD-ROM), contáctese con:
Abogados para los Demandantes Steven Donziger: 212-369-6181 Cristobal Bonifaz: 413-253-5626 cbonifaz@rcn.com
Centro de Derechos Economicos y Sociales (www.cesr.org)
Chris Jochnick: cjochnick@cesr.org
Paulina Garzon: pgarzon@cdes.org.ec
Tel: (593 2) 563-517; Fax: 560-449; General E-mail: cesr@accessinter.net
Frente de la Defensa de la Amazonia (www.ecuanex.net.ec/fda)
President: Luis Yanza (593-9) 803-140 cell phone (593) 6 831 930 admin@fda.ecuanex.net.ec
Amazon Watch (www.amazonwatch.org) Kevin Koenig: Kevin@amazonwatch.org (310) 455-0617
Oxfam America Gabrielle Watson (617) 728-2481 gwatson@oxfamamerica.org